Colaboración de quizás mi primer amigo...

Encuentros Cercanos de Ningún Tipo

Ayer me pasó algo extraño… no, extraño no sino raro o inusual.
Me había acercado a la Facu para averiguar cuando tenía que votar para el centro de estudiantes.
Aquí conviene abrir un paréntesis y aclarar que hacia varios meses que no iba por que este cuatrimestre no estoy cursando nada. Cerrado el paréntesis continúo. Resultó que ese mismo día empezaba la elección con lo cual me dirigí al edificio principal para hacer efectivo mi sufragio.
Tuve que esquivar gran cantidad de alumnos que esgrimían panfletos, gritaban a viva voz las bondades de votar a su agrupación e interceptaban a cualquier incauto que pasara a menos de cinco metros de ellos acribillándolo con preguntas y sentencias.
Cuando logré llegar a la puerta, siempre mirando al piso y caminando lo más rápido posible, vi de refilón a una pareja de muchachas discutiendo. A una de ellas reconocí como miembro de una agrupación con lo que aceleré aun mas el paso, pero la otra me daba la espalda. Al pasar por su lado escuché su voz y reconocí a una compañera que hacia mucho que no veía. Luchando contra todos mis instintos que me aconsejaban seguir me acerqué, interrumpí la discusión y saludé a mi amiga. Ya me estaba girando para huir de allí antes de que la inepta aprendiza de política reaccionara y me capturara con su estúpida verborrea pero me pareció ver una expresión de súplica en la mirada de mi amiga y detuve el movimiento. Sin pensarlo demasiado la tomé del brazo y guiñándole el ojo a su ex interlocutora me la llevé para adentro.
Nos quedamos en el hall de entrada bastante tiempo conversando y riéndolos, y la verdad es que me sentí muy bien. Subimos las escaleras y me encontré con otros dos viejos amigos. También hablamos y nos pusimos al tanto de la vida de cada uno. El único momento gris de la inesperada reunión fue cuando me preguntaron por Laly, (a los que lean este ya largo opúsculo y no sepan quien es Laly solo diré que es “La Mujer de Mi Vida”, en posteriores escritos quizás me explaye sobre el tema). Ese día voté, y me encontré con 3 compañeros más, además de los ya mencionados, y con una chica que no veía desde que empecé la carrera y que quizás me gustaba.
Lo sorprendente del caso, desde mi perspectiva y aparte de que en un solo día me encontré con más gente que en muchas semanas, es que a todos parecía alegrarles el verme y se interesaban por mi. La verdad que me subió un poquito mi ya tan mermada autoestima, pero lo mas importante es que en ese momento comprendí lo solo que había pasado los últimos meses. Y también lo mucho que necesito compartir con otras personas, aunque más no sea hablar frivolidades, contar un viejo chiste o escuchar la risa de una amiga.
Si se espera que ahora culmine con alguna reflexión, pensamiento, conclusión, moraleja o demás; desengáñense por que no tengo ninguna. Simplemente sentí el impulso de plasmar lo que me había pasado sin ninguna otra pretensión, pero no coarto a los lectores que expresen su ira ante mi pretencioso escrito.

SadMan